En abril, las exportaciones mineras alcanzaron los US$634 millones, superando a las energéticas, que sumaron US$561 millones. Esta diferencia se debe a la baja en el precio del petróleo y al alza en los valores del oro y la plata.
Otro dato relevante es que, en el primer cuatrimestre, se exportó litio por US$262 millones, lo que representa un aumento del 40% respecto al mismo período de 2024.
Análisis de la Balanza Comercial
Según el informe de comercio exterior del Banco Central, el sector energético aportó US$561 millones en abril, lo que marca una fuerte caída en comparación con el promedio mensual del primer trimestre, que rondó los US$800 millones. A pesar de esto, los números siguen siendo positivos: en el primer cuatrimestre, la energía cerró con un aporte neto de dólares de US$3.000 millones, US$1.700 millones más que en el mismo período de 2024.
Por su parte, la minería aportó US$634 millones en abril, superando ampliamente el promedio mensual del primer trimestre, que fue de US$400 millones. También es destacable que, en el primer cuatrimestre del año, el sector minero acumuló exportaciones por US$1.860 millones, frente a los US$1.075 millones registrados en el mismo período del año pasado.
Proyecciones y Desafíos
La Bolsa de Comercio de Rosario indicó que, aunque las inversiones en minería están enfocadas en el cobre y el litio a mediano plazo, actualmente el 80% de las exportaciones mineras argentinas corresponden al oro y la plata.
La caída de los precios del crudo está provocando una corrección a la baja en las proyecciones iniciales (hechas a principios de año) respecto al superávit comercial energético para 2025. Este se estimaba en US$9.000 millones, pero ahora se ha reducido a unos US$7.500 millones.
Primarización de las Exportaciones
Estas buenas noticias no modifican la tendencia hacia la primarización de las exportaciones y la economía. Por encima de la energía y la minería, el sector oleaginoso siguió siendo el de mayor superávit en abril, aportando cerca de US$2.300 millones, y un acumulado de US$8.300 millones en el primer cuatrimestre, superando holgadamente los US$6.250 millones del mismo período de 2024.
Claramente, los sectores agropecuario, energético y minero serán los principales generadores de divisas. Si bien esto no es negativo en sí mismo, hace que la economía argentina sea dependiente de la volatilidad financiera global. Esta situación está en el radar de los operadores de mercado, quienes observan con inquietud las reservas negativas de divisas en el Banco Central.